Se evitará verter aguas sobre el revestimiento, especialmente si están sucias o arrastran tierras o impurezas.
Se evitarán golpes y rozaduras, así como el vaciado o limpieza con productos químicos.
PRESCRIPCIONES
Si se observa alguna anomalía en el revestimiento no imputable al uso, como falta de adherencia, porosidad importante, presencia de fisuras, manchas o humedades capilares, con riesgo de desprendimiento, se levantará la superficie afectada y se estudiará la causa por un técnico competente, que dictaminará su importancia y, en su caso, las reparaciones que deban efectuarse.
Las reparaciones del revestimiento deberán realizarse con materiales análogos a los utilizados en el revestimiento original manteniéndose siempre las juntas de proyecto. Para evitar la aparición de parcheados en la fachada debidos a la diferente tonalidad de los colores, se debe picar el revestimiento original en toda la fachada y rehacerlo de nuevo.
PROHIBICIONES
No se admitirá la sujeción de elementos pesados en el espesor del revestimiento, debiendo sujetarse en el soporte o elemento resistente.
No podrán utilizarse productos de limpieza de los que se desconozca si tienen sustancias que puedan perjudicar a algún componente.
No podrán utilizarse productos de limpieza agresivos, especialmente los abrasivos.
MANTENIMIENTO
POR EL USUARIO
Cada año:
Limpieza de revestimientos vistos, con aplicación de agua y frotado manual con cepillo de cuerdas sin realizar una gran presión, en paramentos interiores.
Cada 5 años:
Inspección visual de la posible aparición de grietas, fisuras, roturas o humedades.
POR EL PROFESIONAL CUALIFICADO
Cada 5 años:
Saneamiento o reposición del tratamiento superficial, en caso de existir éste, si así lo indica el fabricante.